Se vienen las vacaciones de invierno y el clima en el sector está caldeado. Los educadores no quieren que sus salarios pierdan (más) contra la inflación y, como contra partida, el Gobierno salteño no responde a sus inquietudes, afirman.
“La realidad es que, si bien adelantaron el tramo que íbamos a percibir en octubre, no hay ningún número propuesto por el Gobierno para el segundo semestre”, explicó Carlos Murga, docente autoconvocado.
Advirtió, en este sentido, que las previsiones económicas marcan que la inflación superará el 70% este año, mientras que los acuerdos establecidos colocan el salario docentes un 35% más abajo.
“El 10 de junio cerraron las paritarias nacionales y quedaron en que habría una nueva revisión. Allí alcanzaron el 60%, pero la Provincia no respeta este número”, apuntó el trabajador.
Según Murga, las dilaciones del Gobierno salteño han empujado al hartazgo al sector; el Ejecutivo local aseguraba que debían esperar que se alcancen acuerdos nacionales para recién, a partir de allí, sentarse con los sindicatos, sin embargo, pasó casi un mes desde que los números de Nación fueron establecidos.
“No vemos que el Gobierno tenga intenciones de llevar estabilidad al salario docente. Ahora, no es como dicen, que nosotros esperamos el momento para hacer paro, no. Hace semanas que esperamos que el Gobierno llame a reunión y aun no anunciaron nada”, apuntó.
Lo cierto es que los delegados tienen el termómetro de las escuelas – continuó el dirigente – y los docentes no quieren volver al aula si los salarios no llegan, por lo menos, al 70% de incremento – es decir, sumar un 25% más ahora – y con una cláusula de revisión en octubre.
“Esperamos que el Gobierno reaccione. Los compañeros están convencidos de que, si no hay ofrecimiento para que no quedemos debajo de la inflación, no se vuelve a clases”, sentenció Murga.