Luciano Romano, abogado defensor de la firma, aseguró que el dinero y los bienes secuestrados durante los operativos son propiedad de los inversionistas, por lo que, una vez avanzada la investigación, podrán ser restituidos.
Ocho personas fueron imputadas por estafas – en número indeterminado – y falsificación de documentación, en el marco de la causa que investiga la operatoria del estudio Ríos y Asociados. Lo informó el abogado Luciano Romano, quien, junto a Marcelo Arancibia, se constituyó como defensor de los detenidos.
Según explicó el letrado, la investigación de la Unidad de Delitos Económicos Complejos surge a partir de detectar irregularidades en la constitución de la empresa; “se observó que se manejaban grandes capitales sin declararlos, además de ofrecer intereses del 100% con plazos de 15 a 20 días”, apuntó.
Cabe recordar que Ríos y Asociados – de acuerdo a los datos expuestos por la fiscalía actuante – no estaba radicada legalmente en Salta y que utilizaba el nombre de un abogado de Buenos Aires, junto a la matrícula de un abogado local fallecido en 2007, para dar “legalidad” a las transacciones.
“El dinero y los vehículos secuestrados durante los operativos son de los ahorristas. Nosotros vamos a proceder a restituir el capital a los inversores, no así los intereses”, añadió Romano.
Detalló, en tanto, que las personas detenidas son oriundas de Metán y de Salta Capital y que estas son empleados de la firma; los responsables de la empresa – advirtió – aún se encuentran prófugos de la Justicia.
“Van a ponerse a disposición de la fiscalía en las próximas horas”, adelantó.
Así las cosas, el abogado negó la existencia de una denuncia que desencadenara la investigación ya que la firma cumplía las pautas que establecía con sus clientes, sin embargo, explicó que la fiscalía realizó una “investigación preventiva” teniendo en cuenta las irregularidades mencionadas párrafos antes, así como también la operatoria en sí.
Finalmente, Romano informó que son, aproximadamente, 2000 los inversionistas que esperan la restitución de su dinero y que, si bien es cierto que muchos de ellos pertenecen a las fuerzas de seguridad, la firma no trabajaba específicamente en este sector.
“Se rumoreó mucho; se dijo que la empresa pertenecía a personal policial y es falso. La gente inventa y consume desinformación. Creo que se trata de vincular gente del poder con grandes estafas”, sentenció.